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Genealogia del Gol

Me motivó escribir este artículo, a raíz de escuchar en una programa deportivo, en esa modalidad tan poco feliz de hablar muchas personas a la vez, en tono (rumor) cercano a la discusión (chimentos de la tarde), donde puede afirmarse ahora y negarse cinco segundos después el objeto mismo (lo que dio origen) de la discusión.

El tema en cuestión( o lo adyacente) era hablar de un equipo ,ya descendido, donde se hacia una ácida crítica a todo el conjunto, pero más que nada dirigida a su jugador insignia o “goleador” que en el mismo torneo llego a la marca de los “cien goles”.

Llevándolo más a lo particular la idea expuesta trataba ejemplificar que dicho jugador mostraba un desinterés manifiesto en su estilo de juego así como una serie de fisuras en sus aspectos técnicos (supongo tácticos también).En el barrio diríamos que se trataba de un jugador de esos “laguneros”, aunque nadie negaría sus condiciones.

Se uso el calificativo (en forma peyorativa) de “empujador de pelota”, aunque si mal no recuerdo el mismo Cesar Menotti afirmaba aquello de que el gol no era ni más ni menos que un “pase a la red” me pregunto si no hay una gran virtud en saber ubicarse en el lugar y momento precisos para empujarla…si esto se logra cien veces, sumando las fallidas, entonces no es una “casualidad” tan mala.

Ahora bien, acercando el tema a lo pretendido, pregunto, a quien se le llama “goleador”?, parece esto una verdad de Perogrullo, pero la respuesta es: al jugador que sabe hacer goles y los hace en cantidad. Podemos bucear en nuestra rica historia ejemplos de estos a quienes vimos con nuestro propios ojos, los que vieron nuestros mayores, llegando hasta los más actuales.

Si comenzáramos a hacer nombres la lista sería larga, los contextos muy variados, las preferencias teñidas quizás del equipo que queremos, aunque algunos de estos “goleadores de raza” (genéticos) trascendieron las fronteras de los colores y el tiempo.

En lo particular hubo un futbolista que logro fascinarme por la plasticidad en sus definiciones, era el “Marqués Sosa”, aunque hizo muchos goles, no se si podríamos rotularlo como “goleador” tratando de hacer alguna comparación mas contemporánea, la manera plástica de saltar martillando de “Patrick Kluivert” se asemejaba bastante a el.

Si se me permite la osadía hubo otro jugador que fue el “Chelo Marcelo Delgado” que hizo goles en la especialidad “fuera del área” increíbles, verdaderamente es para mostrarles el video a los chicos que recién empiezan. La forma de balancear el cuerpo, la separación con el defensor, al mismo tiempo la vista puesta en el movimiento y freno del arquero rival para sacar el latigazo a un poste, había en el todo un acto coordinativo y sincrónico deslumbrante.

Hace pocos días escuche relatar a un antiguo jugador de Estudiantes, luego de hacer dos goles a pocos partidos de su debut, Carlos Bilardo le hablo en el vestuario : “te felicito pibe, el equipo te hizo hacer dos goles”, esto que a simple vista parece en desmedro de lo individual, tiene que ver con una realidad que parece contradecir el valor que otorgamos a los goleadores, pero que forma parte de la estructura del juego, poco o mucho, para hacer goles todos necesitan inevitablemente de grandes “asistidores”. No se trataba solo del sano consejo hacia un joven futbolista.

A veces estas parejas o “pequeñas sociedades” de beneficio mutuo pueden darse entre el enlace y una punta o entre un externo y un delantero central. Una de estas notorias y exitosas parejas que funcionaron como “unidad” fue la del Boca Juniors ganador de casi todo en la década pasada, la constituían Guillermo Barros Schelotto y Palermo.

La estructura de este equipo trabajaba de manera óptima en ubicar a ese goleador que era Martin Palermo “dentro del área” donde estaba su fuerte, que era el juego aéreo, pero si revisamos bien no solo hizo goles de cabeza, sino de rebote y anticipo. Además de esa intuición (olfato) de goleador, también trabajo muy bien en saber “desprenderse de la marca” en el momento justo, tanto hacia atrás como adelante.

Existieron muy pocos futbolistas capaces de generar y terminar sus propias jugadas en el concierto mundial, me refiero a la calidad excelsa de muy pocos, Pele, Maradona, Di Stefano, Hugo Sánchez, Romario, Ronaldo, Messi con sus goles en desequilibrio que parecen de PlayStation.Estos futbolistas y seguramente algunos otros (mi memoria es injusta) trascendieron los esquemas, no necesariamente fueron centrodelanteros, es decir fueron jugadores de cualquier sector de la cancha con el talento innato del gol.

Entonces, la condición es “genética” o se puede/debe trabajar? , la capacidad de ubicarse en el área, la coordinación fina para definir, las inteligencia táctica para anticiparse y generar la duda en quienes defienden etc.,etc.?…La respuesta es “si” en ambos casos. Un pianista o un guitarrista de concierto nunca dejaría de ensayar su partitura por más que se trate de un prodigio musical.

Hubo goleadores que quizás parecieron antiestéticos (dicho con todo respeto) a la vista, Batistuta, Carlos Morete, Gerd Muller, Luis Artime (padre), Omar Asad y otros que tuvieron esa “condición” y la demostraron largamente. Otro interrogante a plantear sería, hay una capacidad(es) para el gol más allá de lo estrictamente técnico?, esta puede ser percibida en una prueba o Scouting de chicos o jóvenes?…

Lo dejo planteado, además me gustaría que quienes escriban, si lo desean, nombren a un goleador que les haya llamado la atención, más que nada cual es la condición que pudieron observarle, sin que sea necesariamente lo tradicional. Desde ya aclaro, puede ser de cualquier lugar y época sin importar sus colores, Un abrazo a todos!!!

 

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