“El Trabajo en equipo divide el esfuerzo y multiplica el efecto”
Para alcanzar el éxito el equipo debe poseer espíritu de equipo. Ello es una tarea complicada para el entrenador, dado que los jugadores difieren en su grado de responsabilidad hacia el equipo. Unos son egoístas, hacen cosas que le sirvan para destacar; otros exhiben una conducta irregular que irrita a sus compañeros de plantilla,...
El grado de éxito del grupo creceráy disminuiráa lo largo de la temporada, y en algún momento el equipo atravesaráuna racha de derrotas, con lesiones y problemas dentro del club. Ello pone a prueba las lealtades, la paciencia y la responsabilidad del entrenador y los futbolistas hasta el límite y es entonces cuando el espíritu de equipo resulta imprescindible.
Factores a tener en cuenta:
La actitud del cuerpo técnico
El entrenador debe aceptar la plena responsabilidad
Practicar un juego sucio y violento o con manifestaciones antideportivas, denota a un entrenador que no posee fortaleza de carácter para controlar a los jugadores.
El entrenador debe poseer el coraje para defender sus principios y asumir toda la responsabilidad por la imagen y conducta de su equipo.
El cuerpo técnico debe trabajar para ganarse el respeto de los jugadores e, igualmente fomentar el respeto entre los jugadores.
La importancia de la tolerancia en jugadores y técnicos.
El trabajo en grupos, excursiones y acontecimientos similares, colocarlos en la misma habitación, etc, puede desarrollar el espíritu de equipo.
El capitán del equipo
Puede hacer mucho para influir en el espíritu de equipo. De ahí que sea el líder natural.
Tiene responsabilidades tanto fuera como dentro del campo.
Debe trabajar en armonía con el entrenador.
Actúa como puente entre el entrenador y los jugadores.
Importancia de determinar con el capitán cuál es su responsabilidad, y cuál no, en el
ejercicio de su cometido.
De suma importancia el compartir un respeto mutuo en la aceptación del modo en
que cada uno trabaja, y de los principios mediante los cuales el juego tendría que ser enfocado y puesto en práctica.
Jugadores problemáticos
Muchos jugadores son incapaces de darse cuenta de que su éxito o fracaso depende del rendimiento del grupo.
Hay distintos tipos de jugadores problemáticos que pueden causar desavenencias en el vestuario o en el campo debido a su completa indiferencia por el entrenador, las tácticas, el programa de entrenamiento y las reglas del club, y suelen ser los futbolistas con mayor talento quienes causen problemas por su conducta irracional e insolidaria.
Los jugadores problemáticos pueden provocar un efecto muy negativo en el espíritu de equipo y el entrenador debe ser implacable para identificarlos y modificar sus maneras o permitirles que abandonen el club a pesar de sus dotes.
“Hay dos tipos de jugadores inservibles, uno es el que siempre hace lo que se le dice y el otro es quien nunca hace lo que se le dice.”
Con frecuencia los problemas se presentan con los futbolistas que no son convocados o seleccionados para el primer equipo.
A veces los jugadores que no causan problemas estando en el primer equipo muestran un cambio de actitud al ser relegados al equipo suplente. Pueden incluso desear que el equipo pierda.
El único modo en que a cualquiera se le puede garantizar un puesto regular en el primer equipo es desarrollando una actitud positiva en el equipo suplente o durante los entrenamientos para recobrar la confianza.
CLASE DE EQUIPO
⇒ Tipo A:
Manifiesta una gran necesidad de amistad y cooperación entre sus componentes.
Los jugadores no se preocuparán en exceso por perder.
Aún cuando estén muy desilusionados tenderán a apoyarse unos a otros contra viento y marea.
⇒ Tipo B:
Le preocupa principalmente la victoria y el éxito.
No les interesa entablar relaciones salvo para funcionar bien como equipo a fin de ganar partidos.
El entrenador deberá determinar hacia que tipo de equipo tiende el suyo y enfocándolo a partir de esa base. Los individuos difieren en sus necesidades psicológicas.
Una mezcla equilibrada de jugadores del Tipo A y el Tipo B es fundamental para que el equipo alcance la victoria.
Necesitamos delanteros que tomen como norte el gol para marcar asiduamente, pero también necesitamos centrocampistas dispuestos a dejar que otros se lleven la gloria mientras él se convierte en un héroe no laureado trabajando duro en un segundo plano.
La imagen del club es fundamental para el espíritu de equipo.
Se ve a los equipo bien organizados, agresivos, habilidosos y atléticos o indisciplinados
inconsistentes y desequilibrados.
Si es la primera se erigirásobre ella para consolidar el espíritu de equipo.
Si se trata de la segunda, el entrenador debe esforzarse para forjar una nueva imagen de
modo que los jugadores tengan confianza, esperanza y aprecio por su cometido en el grupo, sus compañeros, el entrenador y el cuerpo técnico.
Cambiando la imagen del equipo
“Es mucho más difícil cambiar una actitud individual que cambiar la imagen de un equipo”
Mantener reuniones informales
Forjar confianza
Fijar objetivos
Importancia de las sesiones de entrenamiento y su ambiente.
Cambios en el enfoque táctico.
Cambios en la imagen del club (indumentaria, eslóganes publicitarios,..)
LAS REGLAS DEL EQUIPO Y LA DISCIPLINA
“La única disciplina que prevalece es la autodisciplina”
El tipo de plantilla determinarála clase de reglas y la disciplina que serán necesarias para alcanzar el éxito y mantener el espíritu de equipo. El entrenador debe dejar claro que los jugadores que quebranten las normas descaradamente serán tratados con severidad.
El entrenador debe darse cuenta de que el fútbol es un deporte emocional en el que los jugadores experimentan sentimientos de desesperación, depresión, excitación, euforia y falta de confianza. La mayoría de los futbolistas, en una u otra ocasión, se extralimitarán en sus reacciones ante las circunstancias.
El entrenador debe procurar no excederse cuando esto ocurra. Aunque el futbolista haya pasado por alto las reglas incuestionables y deba ser llamado al orden, la severidad del castigo ha de tener en consideración si el jugador estáhaciendo o no un esfuerzo para adaptarse a la imagen y código de conducta del equipo.
Al elaborar las reglas del equipo, el entrenador debe decidir el “tipo”de equipo con el que estátratando y actuar en consecuencia.
Si una plantilla tiende a ser disciplinada y coopera habráuna menor necesidad de reglas; mientras que si los jugadores son discutidores y egoístas, el sistema disciplinario sería más estricto.
Conducta en el terreno de juego
Los jugadores necesitan ser informados con claridad de lo que es y lo que no es aceptable en el terreno de juego.
Relaciones y conducta con respecto al cuerpo técnico y otros jugadores
El entrenador debe concienciar a los jugadores de la necesidad de una conducta adecuada.