La Preparación FISICA del futbolista, para jugar al fútbol.
Desde una perspectiva SISTEMICA.
Hemos pasado mucho tiempo desarrollando jugadores más fuertes, más resistentes y más veloces pero NO para jugar al fútbol.
Por suerte esa ERA está terminando, las nuevas tendencias metodólogicas favorecen la optmización del rendimiento de los futbolistas preparándolos para jugar, adaptando sus condiciones y potencialidades a los requisitos del juego, con una visión SISTEMICA, desde un aprendizaje ecológico, más natural y adaptable a la esencia de este fabuloso deporte.
No se trata de maximizar cualidades, sino de optimizar respuestas que solicita el contexto, se trata de que el organismo se adapte a las necesidades del juego y se puede lograr acoples que establezcan comportamientos organizados de interacciones eficientes y eficaces con el equipo.
La exposición a contextos desafiantes y significativos impulsa la exploración y el descubrimiento de nuevas sinergias, promueve un proceso de coadaptación entre entrenadores e intérpretes, y transforma el deporte en entidades dinámicas.
LA PREPARACION FISICA SISTEMICA.
El preparador físico en el entrenamiento sistémico se convierte en un colaborador activo del entrenador, le ayuda a enriquecer los entornos y le asesora en la sincronización de tareas. Trabajan juntos y su coordinación se hace necesaria para diseñar y planificar las sesiones y la temporada.
El entrenamiento sistémico necesita de una preparación física sistémica. Hasta ahora un jugador estaba bien físicamente cuando los marcadores de rendimiento copiados del atletismo eran óptimos: consumos de oxígeno de 60 mml/kg/min, correr los 30 m. en 4,10 sg., saltar 58 cm en Abalakov… Las pruebas físicas alejadas del juego han quedado obsoletas, sólo sirven para tranquilizar al preparador físico convencional y justificar un trabajo realizado, muchas veces, de manera analítica. De nada sirve tener una gran capacidad de salto si luego en competición el jugador no es capaz de interpretar el momento adecuado para saltar o de intuir la trayectoria del balón. De nada sirve ser el más rápido del equipo en una prueba lineal si durante el partido el jugador no es capaz de percibir y tener en cuenta todos los estímulos que le orientan en la toma de decisiones. Lamentablemente, muchos preparadores físicos sólo se han preocupado por conseguir los jugadores más fuertes, más rápidos y más resistentes, utilizando para ello metodologías de trabajo analíticas y parcelarias alejadas de la realidad del fútbol.
Descomponer el futbol en variables para encontrarle explicación, cuantificar datos buscando certidumbre, no es más que alejarse inexorablemente de la realidad de este juego.
El enfoque clásico en el aprendizaje / adquisición de habilidades y estado físico se reemplaza por el objetivo de aumentar el potencial de diversidad / imprevisibilidad de los equipos y deportistas a través del desarrollo de sinergias.
Punto clave
LOS MAS APTOS NO SON NECESARIAMENTE LOS MAS FUERTES O MAS RAPIDOS, SINO LOS MAS DIVERSOS, LOS QUE MEJOR SE ADAPTAN.
Uno de los principales problemas del entrenamiento radica en encontrar conexiones entre jugadores. Para ello es fundamental entender la estructura y la dinámica de las interacciones entre los jugadores. Las sinergias en el fútbol se producen de manera dinámica dentro de un espacio-tiempo determinado y con intensidades variables de aparición. No siempre y no todo debe hacerse a máxima intensidad, a veces es importantes bajar la velocidad, hacer una pausa para poder sorprender, si no freno para volver arrancar, o cambiar de dirección, o tocar corto para atraer rivales y luego acelerar el juego en la otra zona donde conseguimos favorecernos,si hacemos todo siempre a máxima intensidad terminaremos siendo un equipo predecible.
ENTRENAR NO SIGNIFICA MAXIMIZAR CUALIDADES, SIGNIFICA OPTIMIZAR INTERACCIONES QUE PERMITAN AL EQUIPO DESCUBRIR DE QUE MANERA ES CAPAZ DE SER EFICIENTE Y EFICAZ PARA ADAPTARSE Y COMPETIR DE MANERA FAVORABLE.
No es MAXIMIZAR cualidades. Es OPTIMIZAR rendimiento.
De que servirá que un jugador tenga una potencia aeróbica de 65 ml/kg si no puede controlar bien una pelota bajo presión del rival, o no puede ajustar el golpe del balón para ofrecer un pase a un espacio para que la pelota llegue en momento adecuando y que el compañero la reciba al encuentro, o se apresure en la acciones por no tener una buena percepción del juego. Es por ello que lo importante será ayudar a los jugadores a que puedan acoplar todos los componentes involucrados en el juego, poniéndolos en situación muchas veces ellos podrán OPTIMIZAR su rendimiento y ADAPTANDOSE A LAS NECESIDADES DEL JUEGO, de que manera?…JUGANDO.
OPTIMACION EN EL ENTRENAMIENTO
Como lo mencionamos, no se tratará de promover el desarrollo y adquisición de los valores máximos posibles de cada uno de los parámetros que evalúan a los componentes aislados de dicho sistema sino de ACOPLARLOS ADECUADAMENTE (ejemplo anterior del pase al compañero). No se tratará de que cada uno de sus componentes (jugadores) opera a su velocidad máxima para que el equipo sea veloz. Movimientos muy rápidos y efectivos pueden conseguirse con un buen ACOPLAMIENTO entre jugadores de fútbol sin precisar que cada uno de ellos presente una elevada velocidad máxima.
La cualidad velocidad o intensidad en el equipo, puede emerger sin que sea necesario que esas cualidades las presenta ninguno de los jugadores individualmente, cada uno aportara a esa velocidad del equipo optimizando diferentes capacidades según sus posibilidades, algunos lo harán desde su técnica, otros desde su lectura de juego, otros desde su agilidad, otros desde su motivación, pero no es algo común para todos, los procesos de optimización son individuales y no comunes, ya que cada contextos individuales son diferentes, por consiguiente no se intentará plantear programa individuales para alcanzar unos mismos óptimos, sino plantear procesos individuales para conseguir OPTIMOS individuales. En este sentido no se intentará reproducir ni la misma técnica, ni la misma táctica en deportistas o equipos diferentes.
En la interacción entre los jugadores mediante una practica situacional, podrán optimizar sus capacidades ajustando cada uno desde sus posibilidades individuales acoplándose para que emerjan las propiedades del equipo.
COMO ENTRENAR
Quieres desarrollar la inteligencia táctica del jugador? Sitúalo ante situaciones de juego variables con alta incertidumbre táctica y oriéntalo sobre cómo resolverlas.
Quieres un jugador técnico? En todos tus contenidos de entrenamiento trabaja con el balón siempre en situaciones reales de juego donde el jugador aprenda a relacionar la técnica con el desarrollo de sus intenciones tácticas.
Quieres un jugador físico? Entrena con diferentes estructuras de tareas tácticas en función de los objetivos combinando con acierto los 4 elementos:
Número de jugadores : grupos amplios, medios y pequeños.
Espacios: amplios, medios o reducidos.
Tiempos de trabajo largos medios o cortos.
Reglas variables en función de los objetivos.
En todas las tareas evitar tiempos pasivos y de espera.
Quieres un equipo competitivo? Entrena siempre en situaciones con oposición inteligente con objetivos y normas para los dos equipos , lleva el control del resultado, premia al equipo ganador de cada tarea por pequeña que esta sea.
CARGAS DE ENTRENAMIENTO !!!!
A consecuencia de la no linealidad del proceso (Jirsa, Friedrich, Haken, & Kelso, 1994) las mismas cargas de entrenamiento tendrán diferentes efectos en función del momento en el que se apliquen. Así, los deportistas alternarán períodos de aparente estancamiento con cambios y mejoras repentinas, y una misma carga les producirá diferentes efectos (desde una mejora en el rendimiento hasta un síndrome de sobreentrenamiento) en función del contexto en que se aplique (Hristovski et al., 2010). A una escala temporal inferior, pequeños cambios en determinados parámetros de control (como puede ser la distancia al adversario, la velocidad del movimiento, la velocidad del balón, las dimensiones del terreno, etc.) pueden ocasionar cambios coordinativos radicales (es decir, cualitativos, no proporcionales) en las sinergias individuales o grupales.
Las cargas de trabajo holísticas, evitando la fragmentación, pueden aumentar la eficiencia del proceso de capacitación y evitar el uso excesivo y la sobrecarga.
Las tareas representativas mejoran la coordinación y el acoplamiento percepción-acción.
El objetivo de la complejación y diversificación, en contraste con la maximización de los atributos, evita las repeticiones excesivamente monótonas y el uso excesivo. El principio de diversidad suficiente evita la aplicación de cargas de trabajo de entrenamiento excesivas y evita el sobreentrenamiento y las lesiones.
Como no hay atributos o prototipos de rendimiento fijos y el potencial de diversidad se puede desarrollar de muchas maneras diferentes (propiedad de degeneración), el uso excesivo y la sobrecarga se vuelven innecesarios.
Las sinergias pueden adaptarse, haciendo reconfiguraciones compensatorias en múltiples niveles, evitando así la fatiga prematura y la sobrecarga
Una variedad de limitaciones desafiantes mejora los factores psicoemocionales (por ejemplo, motivación, alegría, bienestar y adherencia) y el estado de salud de los jugadores.
Una de las claves del entrenamiento será la de construir comportamientos sincrónicos moldeables a la variabilidad y perturbaciones del juego.
TENEMOS QUE ADAPTARNOS!!!
La nueva era de la Preparación Física, ya está con nosotros.
Prof. Quique Cesana
Director de GrupoEkipo.
PF en Selecciones Juveniles de Argentina.
Docente en Universidad del Gran Rosario (UGR).
Si te interesa esta temática podes profundizar en el CURSO DE ENTRENAMIENTO SISTEMICO ofrecido por GRUPOEKIPO y la UNIVERSIDAD DEL GRAN ROSARIO.
TODA LA INFO: https://grupoekipo.com/capacitacion/entrenamientosistemico/
