No siempre leyendo libros de fútbol se aprende de fútbol, yo diría que muy pocas veces, en alguna conversación con Juanma Lillo, me dijo, si quieres aprender de fútbol lee ¨La trama de la vida´´de Fritjof Capra, y cuanta razón tenia, cada párrafo contiene una relación directa con la esencia de este deporte . Y en eso estuve, y quisiera compartir algunas partes donde trate de transferir al fútbol lo que humildemente entendía. Quise comenzar por este factor, el de SOSTENIBILIDAD, me pareció fundamental tener en cuenta este punto principalmente en nuestro medio donde poco o nada se respeta.
Nuestros líderes no sólo son incapaces de percibir la interconexión de los distintos problemas sino que además se niegan a reconocer hasta qué punto lo que ellos llaman soluciones comprometen el futuro de generaciones venideras. Desde la perspectiva sistémica, las únicas soluciones viables son aquellas que resulten «sostenibles».
El concepto de sostenibilidad se ha convertido en un elemento clave en el movimiento ecológico y es sin duda crucial. Lester Brown, del Worldwatch Institute, ha dado una simple, clara y hermosa definición: «Una sociedad sostenible es aquella capaz de satisfacer sus necesidades sin disminuir las oportunidades de generaciones futuras.
» Éste, en pocas palabras, es el gran desafío de nuestro tiempo: crear comunidades sostenibles, es decir, entornos sociales y culturales en los que podamos satisfacer nuestras necesidades y aspiraciones sin comprometer el futuro de las generaciones que han de seguirnos.
En el fútbol como en la vida, el desafío es crear proyectos SOSTENIBLES, es decir, equipos en las que los distintos componentes puedan satisfacer sus necesidades y aspiraciones sin comprometer el funcionamiento colectivo y las aspiraciones futuras.
Por ejemplo en el fútbol profesional las contrataciones de jugadores foráneos al club, trabando posibles promociones de jugadores propios, ventas apresuradas que no dan tiempo a una maduración adecuada, que hacen que ese jugador vendido no se aproveche ni en el club de origen ni al cual se vendió ya que seguramente no podrá adaptarse al fútbol elite internacional. También dentro de lo deportivo, muchas veces no se respeta la continuidad de un método de trabajo y estilo de juego con el que se identifica la Institución, cambiando permanentemente cuerpo técnico no solo de primera sino también hasta los proceso de los coordinadores de divisiones juveniles son cortados, confundiendo y desviando un proceso natural de desarrollo futbolístico, estas entre otras cuestiones hacen que los Clubes no tengan coherencia para un proyecto SUSTENTABLE.
En este aspecto, lo transferimos también al fútbol formativo, donde las consecuencias son terriblemente más nocivas, muchas veces en las divisiones menores, las necesidades políticas de una Institución o del mismo entrenador de turno, van en busca de resultados inmediatos por aspiraciones personales, políticas o simplemente por satisfacer su egocentrismo, todo en detrimento de la formación especifica de los jóvenes, lo que disminuirá seguramente las posibilidades futuras de potenciar sus condiciones deportivas. Los entrenadores en busca de resultados inmediatos, a veces presionados por el entorno, los directivos, otras veces por ignorancia conceptual, apelan a la manipulación de los jóvenes para beneficio propio, no olvidemos que el fútbol formativo, tanto juvenil como infantil, desgraciadamente ha servido para llenar, muy a menudo, egos a base de triunfos cuantitativos, cuando en realidad los triunfos cualitativos son los que tendrían que primar.
Los Clubes que pretendan un proyecto SOLIDO y SOSTENIBLE, deberán entender esta perspectiva desde esta visión sistémica, teniendo el coraje y convicción de postergar satisfacciones egocéntricas de entrenadores y dirigentes a favor de un buen proceso formativo para nuestros jóvenes, sin hipotecar su desarrollo futbolístico.
No somos lo que hacemos ni lo que pensamos, tan sólo somos la huella que dejamos. (anónimo)
Prof. Quique Cesana
Creador de Grupoekipo.
Actual PF Selecciones Juveniles AFA.
Docente en la Universidad del Gran Rosario (UGR).