El coaching ontológico trabaja sobre el tipo de observador que somos de la realidad. Supone que cada uno de nosotros tiene una experiencia del mundo que es coherente con nuestra manera de actuar. Es decir: que la manera en que interpretamos lo que nos ocurre, incide directamente en el modo en que actuamos. En este contexto, si hacemos una revisión del tipo de observador que estamos siendo, podemos modificar nuestra manera de actuar.
El coaching ontológico tiene como finalidad el logro de objetivos extraordinarios y, para ello, propone desarrollar las formas de ser adecuadas que permitan lograr dichos objetivos. En este sentido, opera de manera inversa a lo que podríamos considerar habitual: normalmente buscamos tener cosas (o alcanzar retos), para ser de una determinada forma.
La propuesta del coaching ontológico es a la inversa: trabajar el ser de una manera determinada, para tener resultados. Supongamos un coachee que quiere como objetivo extraordinario tener éxito profesional y que, con ello, espera llegar a ser una persona capaz, segura de sí misma, fuerte, reconocida… En realidad, si fuera una persona capaz, segura, fuerte y reconocida, seguramente lograría su objetivo de tener éxito profesional. La clave de alcanzar lo que nos proponemos, está en aprender a ser de la manera que hay que ser para lograrlo.
Una de las barreras más frecuentes para el cambio y el aprendizaje, es la creencia de que las personas no pueden cambiar sus comportamientos. Nosotros pensamos, muy al contrario, que nuestra forma de ser es el resultado de la interpretación que hacemos de la historia de nuestra vida y que, cuando cambiamos nuestras interpretaciones (el observador que somos), se modifican los comportamientos.
Y el COACHING DEPORTIVO?
¿Te has preguntado alguna vez hasta dónde podrías llegar si se desarrollara todo tu potencial?
Si pudieras maximizar tu auto-confianza y superar los miedos y los límites que te impiden conseguir el éxito que buscas?
El coaching deportivo es el proceso de acompañamiento para desarrollar el potencial de deportistas, entrenadores, equipos y su entorno que permite optimizar el rendimiento deportivo y el bienestar, tanto personal como colectivo. Identifica factores que limitan el rendimiento y proporciona herramientas para afrontar con éxito la competición.
Hoy sabemos que para conseguir el alto rendimiento en el deporte es necesario combinar un talento innato con una buena preparación física y técnica y con un buen entrenamiento mental y emocional. La excelencia deportiva requiere «mentalidad de campeón».
Cada deportista o entrenador que quiera mejorar resultados debería preguntarse:
“¿Estoy trabajando las competencias mentales y emocionales tal como estoy entrenando la preparación física, técnica y táctica?»
Los expertos coinciden en que la preparación mental y emocional es la gran asignatura pendiente del deporte. Los que ya han disfrutado del coaching deportivo ya recogen sus frutos, sólo hay que mirar a Rafa Nadal, el Barça de Guardiola, la Selección Española de Baloncesto, o mucho más cerca un club como el Reus Deportivo, que acaba de proclamarse campeón de Europa de Hockey después de estar trabajando su objetivo con un coach.
PRIMERO CURSO PRESENCIAL DE COACHING DEPORTIVO EN ARGENTINA
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