Métodos y Medios del Desarrollo de Fuerza Explosiva por Medio de Carreras Lastra

Nos referimos a esta como una capacidad condicionante pero a la vez condicionada por una serie de factores.
Esta es la capacidad que nos permite realizar una acción en el menor lapso de tiempo posible.
Los factores que condicionan la velocidad como tal son varios: la raza, la condición genética, la biomecánica, el desarrollo cuantitativo de las demás cualidades físicas, etc.
Sin embargo, en el fútbol el factor que marca un quiebre definitivo, es la posesión o no del balón.
La carrera libre con el objetivo de conseguir la pelota puede desarrollarse en su máxima expresión, pero cuando se debe trasladar el esférico, la velocidad disminuye. Causa de ello es el propio desplazamiento con el elemento, que ya no puede ser libre.
Las técnicas de traslado y sus diferentes tipos, la condición del suelo, la dificultad de la situación del balón y la complejidad que ofrece la disposición del adversario, condicionan el desarrollo de la velocidad máxima.
La carrera libre con el objetivo de conseguir el balón, en este deporte, tiene distancias variables. La de treinta metros es la más frecuente entre las más largas.
Desde el punto de vista del atletismo la carrera de cien metros es la más representativa.
La división segmentaria de dicha carrera (reacción, aceleración, velocidad lanzada, prolongada), nos permite ver como factores decisivos la reacción y la aceleración, dejando de lado un tanto la lanzada, y perdiendo importancia la prolongada.
Podemos afirmar que la velocidad de reacción, define el liderazgo a la hora de disputar una pelota. Esa capacidad de poner en función el músculo a partir de un estimulo es crucial.
Si bien los estímulos pueden ser auditivos, aviso de la situación por un compañero para arrancar una acción; táctiles, como la percepción a ciegas por contacto físico con un rival e inicio de una persecución; son los visuales los más usados en este deporte, ya que la observación de las acciones determina la decisión a tomar.
Se puede afirmar que la carrera en este juego la gana el que inicia primero el movimiento, ya sea por mayor concentración haciendo más veloz el circuito neuromuscular de percepción del estímulo con la consiguiente respuesta muscular, o bien por la observación anticipada de la jugada.
Debemos tener en cuenta que las carreras en este deporte casi siempre confluyen en un punto de disputa, (la pelota), al que arriban casi juntos ambos contendientes del balón.
De aquí, que si uno inicia primero la carrera el otro queda inmediatamente por detrás y por más rápido que sea tendrá siempre el obstáculo del primero; o bien deberá recorrer una trayectoria diferente, tardando más tiempo por andar un camino más largo. Asimismo, las diferencias de velocidad en distancias cortas (30 mts), no muestran variaciones ostensibles, por lo que si se inicia primero la corrida, se habrá tomado una ventaja decisiva.
La velocidad de aceleración es muy importante, ya que condiciona la distancia más larga y frecuente de este deporte (30 mts). Es el metraje aproximado en el que el deportista puede progresar continuamente en la carrera hasta alcanzar su máxima velocidad.
Se debe entrenar este segmento de la carrera para consolidar la de reacción y tener la mayor prestación posible para lograr la mayor eficacia y eficiencia en este tipo de acciones, que son las que causalmente definen el partido.

LOS MÉTODOS:
Para entrenar la velocidad de aceleración los métodos utilizados con mayor frecuencia son:

Este tipo de metodología de trabajo involucra, el tipo de impulso neuromuscular, la coordinación Intermuscular e intramuscular, la fuerza, la capacidad elástica (manifestada por el ciclo de estiramiento y acortamiento muscular) y la velocidad de contracción; en el complejo juego de músculos agonista, antagonistas y colaboradores; expresados en una carrera sin el elemento pelota, aunque esta sea la excusa o el desenlace final de la acción iniciada.
Se trata de transportar un peso que no deteriore esta fina combinación de acciones, para transformarla en una carrera que nada tenga que ver con la de mayor expresión en velocidad, ni deteriore la técnica de la misma. El objetivo es involucrar siempre a las fibras musculares más veloces y explosivas en su totalidad, sin perjudicar ningún factor que funde las bases de la técnica del movimiento.
Es obvio que se introduce casi sin querer la velocidad de reacción, ya que es necesario un alto grado de concentración para iniciar el ejercicio con la vehemencia necesaria, (máxima). De tal modo se buscará que haya un elevadísimo reclutamiento de fibras, a fin de que dicho método refleje la realidad de acción de juego.
La velocidad de reacción será estimulada en un alto porcentual por señales visuales, las más usadas en este deporte. Las órdenes auditivas y táctiles son importantes en acciones a ciegas guiadas por el compañero, y en contactos con el rival, que hacen iniciar acciones de evasión o persecución a máxima velocidad.

La carrera lastrada contará con la utilización en este caso de trineos.
La lógica de trabajo nos inducía al criterio de agregarle a la carrera una carga del 10% y 5% del peso corporal. La idea de que un sujeto en un mismo recorrido, tardaría un 10% más con el 10% más de su peso parecía tener sentido.
Pero al realizarse evaluaciones específicas de carreras libres y con una carga de esas características (10% o 5% del PC), se observó que los tiempos no se relacionaban.
Como se podrá observar en el punto descrito como “Operatoria” para obtener las cargas verificadas (tabla 3); cuando se logran éstas, en un alto porcentual no coinciden con el peso corporal (PC).
Esta ausencia de correlación podemos adjudicársela a la resistencia generada por el rozamiento; la disposición cuantitativa y cualitativa de fibras rápidas; a su cantidad de placas motoras, a la velocidad de transmisión nerviosa; a la distribución de la masa corporal, etc.

Este desarrollo surge ante la necesidad de cuantificar específicamente la carga de trabajo, sin deteriorar ni afectar todo lo que involucra una carrera de máxima velocidad.

CONDICIONES DEL TRINEO:
Para ello utilizamos un trineo con carga verificada, cuyo tiro conductor tenga una longitud de cuatro metros si va aferrado a la cintura pélvica y de ocho si va sujeto a la cintura escapular. segun afirmaciones de los estudios biomecánicos.
Es obvio que el peso del trineo o elemento similar será sumado al lastre acoplado para establecer un peso estándar, para todos los deportistas, y hacer fácil la operatoria de evaluación.

CARGA VERIFICADA:
Se expresa como aquel lastre derivado exactamente de la evaluación arrojada, permitiendo una precisión casi total de la condición de carrera.

PERDIDA DE VELOCIDAD:
Se hace referencia aquí al concepto de disminución de la velocidad máxima, comparando los desplazamientos sin transporte de lastre, e idénticos movimientos con peso transportado (carga estándar).

CRITERIO ADOPTADO:
Considerando el criterio de las carreras en pendientes ascendentes, donde los planos no deben ser mayores a 15º, ya que la pérdida de la velocidad sería tal que no se estaría en el rango de lo perseguido objetivamente. Se considera que sería mayor al 10% la disminución de la velocidad en este tipo de acciones por encima de esa graduación del ángulo del plano.
Por otro lado se ha manifestado que las perdidas de velocidad hasta el 10%, siempre contemplando la acción como un esfuerzo máximo, deteriora esta cualidad en forma momentánea, ya que se encontró una alta correlación entre este tipo de trabajos y la fuerza máxima, utilizada en ejercicios derivados del levantamiento olímpico en los periodos preparatorios generales o bien en el periodo acumulativo, referido a los trabajos de cargas concentradas.
Puede decirse pérdida transitoria, ya que esta es la base sustentadora de la mejora de la cualidad en etapas siguientes de la periodización, evidenciando así una base de fuerza mayor para el desarrollo inmediato de fuerza explosiva o de velocidad en rangos superiores.
Otra de las correlaciones encontradas esta referida a la perdida del 5% de la velocidad, que está vinculada con la fuerza explosiva, a utilizarse en periodo preparatorios específicos, o de transformación en las tareas de cargas concentradas. Surge esto de la afirmación generada por la idea de ejecutar un ejercicio de fuerza con sobrecarga a gran velocidad y con un peso elevado, haciendo hincapié en la manifestación de velocidad. Se descartan aquí ejercicios derivados de la ley de Hill.
Estos datos, además de surgir en nuevas bibliografías de nuevos estudios; C. Bosco y Dalmonte lo manifestaron oportunamente.
Se elige 30 metros de carrera por ser esta la media del juego en velocidades máximas. Podría adoptarse una distancia menor, sin dudas, aunque más largas involucrarían ya la velocidad lanzada y sería más complejo todo su análisis y ejecución; y hasta se podría incursionar involuntariamente en otro sistema de energía al que no se quiere abordar con este tipo de trabajos.
Se vincula este desarrollo con el del sistema anaeróbico sin presencia de ácido láctico., ATP-PC.

“Este tipo de tareas, combinadas con trabajos pliométricos y de coordinación también lastrados, fortalecen la concepción de mejoras sustanciales en el desarrollo de las acciones explosivas, de las que se nutre el FÚTBOL”.

OPERATORIA:
1º: Establecer la máxima velocidad de carrera en 30 mts.

2º: Establecer la máxima velocidad de carrera con trineo y un peso estándar en la misma distancia.

3º: Establecer los tiempos de carreras deseadas para perder un 10 y un 5% de velocidad.
VEL+10% Y VEL+5%=VD (velocidad deseada).

(tabla 1)

4º: Establecer la diferencia de tiempos ocasionada por el traslado del peso.
VEL C/L – VEL = Dif Vc/l y V
5º: Establecer las diferencias entre las VD y la de 30 mts máxima sin lastre.
VD 10% – V = Dif y VD 5% – V =Dif
6º: Establecer la carga necesaria, (carga verificada) para perder 10% y 5% de la velocidad máxima
.

(tabla 2)

Ej: Ferradas M. lastre 9,5 kg.
1º: V 30M = 4,46”
2º: V C/L 30M C/11KG = 4,94”
3º: V + 10% = VD1 4,46” + 10% = 4,91”
V + 5% = VD2 4,46” + 5% = 4,68”
4º: V C/L – V = 4,94” – 4,46” = 0,48”
5º: VD1 – V = Dif 4,91”- 4,46” = 0,45”
VD2 – V = Dif 4,68” – 4,46” = 0,22”
6º: Si con 9,5kg Ferradas perdió 0,48”
con X kg perderá 0,45” perderá 0,22”
CV 10% = 0,45” x 9,5kg / 0,48” = 8,8kg
CV 5% = 0,22” x 9,5kg / 0,48” = 4,4kg

(tabla 3)

Manejar a su criterio de necesidades e intereses la planificación y su periodización, utilizando los datos obtenidos.

CARGAS AGRUPADAS:
Con el objeto de poder tener una mayor disponibilidad didáctica y una practicidad superior, se pueden agrupar a los deportistas con cargas similares.
Se debe tener en cuenta en el caso de los trabajos relacionados con la perdida de velocidad, que no sean por encima de la perseguida. Si supera el 10% la velocidad no será tal, y por encima del 5% ya no tendrá un carácter explosivo. La igualación deberá ser hacia abajo.

DOSIFICACIÓN:
Corresponde al sistema anaeróbico no láctico, ATP-PC, ya que los esfuerzos serán máximos y no durarán más de 5 segundos.
Los tiempos de recuperación entre estímulos van de las 24 a las 72 horas, según el nivel de estrés alcanzado por el estimulo precedente.
La micro pausa será de 1 min Si se quiere una recuperación incompleta y de 1,30 min Si se desea mayor recuperación del sistema. La macro pausa de 3 a 5 minutos buscando reiniciar la siguiente serie con una buena recuperación energética y nerviosa.
La duración total del estimulo irá de 15 a 40 minutos, según la seriación contemplada para ese momento del desarrollo de la planificación.

PERIODIZACIÓN:
Como antes se expresó, las tareas organizadas con perdidas del 10% de velocidad son vinculadas a la fuerza máxima y por estar en el límite donde la velocidad puede dejar de ser tal. Y las del 5% a la de la fuerza explosiva.
Macrociclo tradicional:
Periodo de adquisición:
Preparatorio general: Perdida del 10% de la velocidad.
Preparatorio especial y específico: perdida del 5% de la velocidad.
Periodo competitivo:
Perdidas del 5%, en microciclos de choque, corrientes y básicos. Según crea conveniente el criterio del entrenador. Se sugiere quitarlo en microciclos de descarga para favorecer la supercompensación.

Cargas concentradas:
A: acumulación:
Ejercicios de 10% de pérdida de la velocidad.
T y R: transformación y realización:
Aquí ya deberán ser del 5% las perdidas de velocidad.

EDAD ADECUADA:
Hasta los 12 años, deberá existir la fundamentación de las técnicas de movimiento, ya que no podrá ser veloz aquel que corre mal.
Hasta la explosión puberal, se podrá incursionar en este tipo de trabajo para su adaptación.
Con la llegada de la pubertad, el incremento hormonal adecuado para el entrenamiento de la fuerza sistematizado esta listo, y esta vinculación estrecha entre ambas capacidades unidas estará lista para ser desarrollada.

Profesor BELLEZZUOLI LUIS ALBERTO.
D.N.I. 17.285.689.
Nº REGISTRO 781579.
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